Supongo que los cómics no son para mí: mi propia historia sobre la vigilancia de la infancia y por qué no basta con hacer cómics para niñas

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Así que, sin duda, agosto fue un mes ajetreado, complicado y frustrante para las mujeres en la cultura nerd, ¿no es así? Con tantas cosas que van mejor para las mujeres en los videojuegos y los cómics y otras avenidas nerds, todavía tenemos profesionales del cómic que acosaban a las mujeres y amenazas de muerte enviadas a mujeres en los videojuegos y más amenazas de muerte enviadas a mujeres que hablan de mujeres en los videojuegos, y tenemos una desagradable reacción contra cualquiera que diga que todas esas cosas no están bien. Incluso criticar una portada realmente mala puede provocar una reacción violenta, porque ¿cómo nos atrevemos a cuestionar el arte, verdad?

La cuestión es que, si bien todo esto parece que se nos cae encima a la vez, ninguna de estas historias es nueva. Las mujeres que recibieron amenazas de muerte por tener una opinión sobre cosas nerds sucedieron antes de agosto. También ha sucedido que los hombres en los cómics acosaban a las mujeres. Gritar a las personas que se atreven a señalar que una superheroína parece una muñeca sexual mal construida ha sucedido mucho en los últimos años. Y aunque estas historias varían en tema y gravedad, el mensaje más importante es que sí, las mujeres en la cultura nerd en 2014 todavía se enfrentan a todo, desde el amargo rechazo de las críticas hasta la virulencia total y las amenazas. A pesar de la evidencia de que las cosas están mejorando para las mujeres nerd, es evidente que las mujeres son atacadas incluso por mencionar que todavía hay sexismo y control inherente al sistema.



Entonces, ¿adivinen quién decidió escribir un artículo sobre su propia experiencia con el control de la puerta y por qué no se involucró en los cómics hasta los 20 años?

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Tengo el mejor o el peor momento para esto.

Curiosamente, fue el Animorfos Programa de televisión que sube a Netflix y que me hizo escribir esto mucho antes de que este mes caótico se volviera caótico. Porque si bien el programa en sí es una gran porción de bondad de acción en vivo cursi de los 90 protagonizada por un joven Shawn Ashmore y un joven ese tipo de dolores reales , la serie de libros para adultos jóvenes en la que se basó fue una mirada cada vez más oscura e intensa a un grupo de preadolescentes que tenían el poder de convertirse en animales y la responsabilidad de ser los únicos en la Tierra capaces de luchar contra una fuerza alienígena invasora en secreto. Los libros se sumergieron en cuestiones de esclavitud, genocidio y ética vacilante en tiempos de guerra, y también resultó ser mi serie de libros favorita en la secundaria. Al ver que el fandom aparecía más en línea después de que el programa llegó a Netflix en las últimas semanas, comencé a pensar en mis intereses cuando era niño. Yo era un lector voraz mientras crecía y me inclinaba por la ciencia ficción y los héroes con poderes. Me encantaba ver a los personajes femeninos tomar una posición y convertirse en héroes. Si bien tiene sentido, amé Animorfos , los cómics (especialmente los que vienen de los Dos Grandes) parecen encajar perfectamente en esos perímetros, ¿verdad? Entonces, ¿por qué no me metí en los cómics hasta que fui adulto?

Quienes me siguen en las redes sociales saben que soy un fanático de los superhéroes y que me apasionan los dibujos animados de superhéroes. Yo tenia siete cuando Batman: la serie animada salió y, como muchos niños de esa época, lo adoraba. La DCAU no solo definió cómo veo los mitos de Batman hasta el día de hoy, sino que también me inició en el camino para amar lo que podrían ser los superhéroes. Mucho de eso tuvo que ver con los grandes personajes femeninos de ese universo. Barbara Gordon significa mucho para mí, y aunque no estuvo en muchos de los primeros episodios de B:TAS , las historias en las que estaba tocó una fibra sensible. Es posible que todavía sea la superheroína favorita en gran parte debido a ese programa. También pude ver a una Catwoman que era diferente a la que retrataban Tim Burton o el programa de televisión de los sesenta. Esta Selina no era malvada o loca, solo tenía su propia ética que no siempre se alineaba con la sociedad o con la de Batman. Hizo lo que sintió que era correcto y me encantó esa complejidad de su personaje.

También era un gran admirador de los Hombre araña y X Men caricaturas. De los muchos personajes femeninos en esos programas, sus versiones de Storm y Rogue fueron especialmente importantes para mí cuando era niña. Porque yo era una niña muy solitaria que quizás era un poco demasiado habladora y demasiado ruidosa, y estas heroínas eran audaces y descaradas. ¿Recuerdas las declaraciones de Storm al cielo en ese programa? ¿Recuerdas el descaro de Rogue? ¿Recuerdas a Catwoman siendo inteligente y Batgirl pateando traseros? Porque lo hago.

Entonces, con esos programas que pusieron en marcha mi amor por estos personajes, ¿por qué no me metí en los cómics? Bueno, mis recursos para los libros eran principalmente la biblioteca de la ciudad, la biblioteca de la escuela y la ocasional Feria del Libro Scholastic, todo porque estaban bien en mi escuela o, en el caso de la biblioteca de la ciudad, mi mamá estaba feliz de llevarme allí. Si había tiendas de cómics en algún lugar cercano a nosotros (estoy seguro de que las había en los pueblos de los alrededores), no anunciaban para familias. Es un problema bien conocido con el formato tradicional de la tienda de cómics: donde solían venderse en supermercados y tiendas generales, los cómics se promocionaban casi en su totalidad en las tiendas de cómics y no para el público en general, por lo que los libros solo eran un producto especializado. los lectores actuales han oído hablar.

Pero la falta de una tienda de cómics no necesariamente me habría dejado sin nada. Los libros de historietas se vendieron (y todavía se venden) con una opción de suscripción por correo. Cuando era más joven había sido parte del super especial Club de niñeras suscripción de correo. Si hubiera encontrado los cómics que quería, estoy seguro de que mis padres me habrían ayudado a configurar una suscripción. Entonces, ¿por qué no sucedió eso?

No es tan cortante y seco, pero hay un recuerdo que está grabado en mi cerebro. Mencioné antes que era un niño entusiasta pero solitario, y aunque mi boca me metía en problemas con más frecuencia de lo que me gusta admitir, todavía traté de encontrar formas de conectarme con mis compañeros de clase porque quería amigos. Durante un día al azar en sexto grado (por lo que sería 1996 o 1997), un grupo de niños estaba mirando una carpeta de historietas que uno de los niños trajo de casa. Escuché a uno de ellos mencionar a Black Cat, y me emocioné porque conocía a ese personaje de la Hombre araña dibujos animados. Me acerqué a sus escritorios y les pregunté si podía comprobarlo, y el chico que tenía la carpeta (confundido de que incluso estuviera hablando con ellos) señaló una de las imágenes más grandes. Me incliné para ver a Black Cat con su disfraz completamente abrochado. Por supuesto, su escote era la materia de los malos pechos de Liefeld. Me congelé porque me daba vergüenza ver una foto como esa y también porque me di cuenta de que los chicos la miraban porque querían comerla con los ojos, no porque les gustara el personaje. Vi una foto de Rogue (uno de mis personajes favoritos) en la página opuesta, similar a la foto de Black Cat con el traje abrochado, malas proporciones, vidriosos falsos que ven aquí.

Todavía no conocía el término mirada masculina. No me enteraría de que tenía un nombre hasta muchos años después, cuando estaría en el fondo de mi mente mientras veía tantas películas y programas de televisión y, sí, incluso leía cómics. Pero mirando hacia atrás, eso fue lo que vi en el álbum de recortes de ese chico: algunos de mis personajes favoritos fueron despojados de su agencia y su personalidad por el bien de la mirada masculina que todo lo consumía. No estaban ahí para ser personajes. Simplemente objetos.

Y recuerdo claramente que miré al grupo de chicos y que tal vez parecieran un poco avergonzados de que los atraparan con fotos de chicas sexys. Pero al mismo tiempo me miraron molestos, ¿cómo me atrevo a arruinar lo que estaban disfrutando? ¿Cómo me atrevo a entrometerme? Era como si todos estuvieran sosteniendo carteles que decían No eres bienvenido. Y recuerdo claramente haber pensado, supongo que los cómics no son para mí. Tal vez las caricaturas de superhéroes todavía estaban bien para mí, pero claramente las historietas eran cosa de chicos, y no quería lidiar con esas miradas más de lo que ya tenía que hacerlo.

Esta no fue la única vez que sentí que me sacaron de los cómics o incluso que me sacaron de los pasatiempos de los nerds en general. Pero cuando pienso en la vigilancia y el sexismo, ese recuerdo me viene a la mente. Me cansaba mucho compartir mis tendencias nerd con chicos de mi edad durante mucho tiempo.

Nota al margen: cuando escribí sobre esta experiencia en mi blog Hace unos años, un conocido masculino me envió un mensaje en Facebook para decirme que leyó mi publicación y declaró que yo (y las chicas como yo) éramos los culpables de que los cómics fracasaran en los años 90 porque no podíamos aguantarlo y simplemente superarlo. Nosotros mismos. Le quité la amistad esa noche.

Me doy cuenta de que no todas las chicas fanáticas de los superhéroes tenían este problema. Conozco mujeres de mi edad y mayores que encontraron cómics (tanto de Big Two como de otras compañías de cómics) que se ajustaban a sus gustos y requisitos para una buena lectura. ¡Pero eso es lo más triste para mí! El hecho es que había cómics que me hubieran gustado en ese entonces. El truco es que uno de esos era un cómic de larga duración para Batman: la serie animada, ¡y nunca supe de eso hasta hace un par de años! Si me hubieran dicho acerca de esta conexión con uno de mis programas favoritos, y si no hubiera sido por esas señales de advertencia que me decían No se permiten chicas, tal vez podría haberme encontrado amando los cómics mucho antes. No es que solo hubiera cómics sexistas cuando yo era niño, es que el mensaje que se me clavó en la cabeza fue que los cómics sexistas eran el estándar y que si no me gustaba, no debería leerlos.

Entonces, en lugar de tiendas de cómics, tenía otros recursos, a saber, las ferias del libro Scholastic, que llegaron directamente a mi escuela con literatura para jóvenes adultos en una variedad de géneros. Fue una de esas ferias del libro donde vi por primera vez Harry Potter alrededor de 1999, pero en 1996 fueron los primeros libros en el Animorfos serie que vi. Las portadas se ven bastante horribles ahora (las transformaciones no envejecen particularmente bien), pero recuerdo haber visto niños como yo, niñas como yo, en las portadas. Las chicas no estaban allí para ser dulces a la vista; eran solo los personajes principales. Y resultó que se estaban transformando en animales asombrosos. Las chicas como yo se convierten en animales para luchar contra una invasión alienígena malvada ... no es de extrañar que me comiera estos libros.

Y una de las cosas que amaba Animorfos ? No se burló de sus lectores. Cualquier fan de la Animorfos Los libros le dirán que la serie trató temas intensos y contó con la violencia en todos los libros. En el primer libro, los niños ven a un aliado devorado frente a sus propios ojos. Dentro de los primeros diez libros, un miembro de su equipo es mordido por la mitad durante una misión (y dicho miembro que puede transformarse de forma segura no borra el estrés mental de ser mordido por la mitad). Debido a la naturaleza parasitaria de sus enemigos, tienen que preguntarse constantemente dónde se traza la línea en lo que respecta a matar huéspedes humanos. Hay varios momentos a lo largo de la serie en los que la línea entre los métodos éticos y no éticos de luchar contra sus invasores se difumina. Ah, sí, y hay un par de casos de genocidio por parte de los buenos. Estos temas no siempre se manejaron a la perfección (especialmente cuando K.A. Applegate trajo escritores fantasmas para ayudarla a completar las historias), pero no se puede decir que la serie tirara de los golpes.

El punto es que nunca se trató de que los cómics fueran demasiado oscuros o adultos para que yo los manejara. Me encantó que Animorfos Sacó a relucir el gris moral de la guerra y cómo la ética puede vacilar. Me encantaba estar leyendo una historia en la que los héroes no eran perfectos y cuyas vidas se volvían más oscuras a medida que avanzaban en la pelea. No necesitaba necesariamente historias calificadas como G que ignoraran temas difíciles. Incluso ignorando mi lectura Animorfos por completo, mis otras inmersiones en la ciencia ficción y la fantasía incluyeron la de Madeline L’Engle A Arrugas en el tiempo universo y Diane Duane Joven mago serie. Todos estos libros tienen temas complejos de ética que me ayudaron a cuestionar mi propio mundo. Todos estos libros también tenían como protagonistas a mujeres jóvenes y evitaban objetivarlas. Cuando tenía novelas que trataban a mis heroínas como personas y con la mala reputación de los cómics, ¿pueden culparme por no acercarme a una tienda de cómics hasta que cumplí los 20?

Estas son solo mis propias experiencias, mis propios recuerdos y arrepentimientos. No estoy seguro de cómo se relacionan con otras mujeres que amaban a los superhéroes en los 90, pero veo mujeres jóvenes en la cultura nerd de hoy y me pregunto si han pasado por sus propias versiones de esos chicos y esa carpeta.

Quiero decir, ha mejorado para las chicas en los cómics. Algo así como. Han mejorado algunos aspectos. Pero, ¿cuánto de eso se trata simplemente de intercambiar un tipo de control por otro? Por un lado, hay tiendas de cómics que atienden a clientas (incluida mi propia tienda de elección, Cómics del centro en Indianápolis). Por otro lado, todavía hay demasiadas tiendas que tratan mal a las clientas (por ejemplo, este pedacito de horror que salió ayer), y la suposición de que las chicas no van a las tiendas de cómics se perpetúa en la cultura pop hasta el punto en que La teoría del Big Bang ha tenido múltiples episodios y lo ha tratado como un milagro.

Por un lado, es mucho más fácil para las mujeres jóvenes descubrir nuevos cómics, averiguar por dónde empezar con series más antiguas y conectarse con otros lectores de todo el mundo gracias a Tumblr, Twitter e incluso una búsqueda rápida en Google (no para mencionar las opciones electrónicas en expansión para comprar y leer cómics que vienen con los lectores electrónicos). Por otro lado, esas mismas mujeres jóvenes podrían tener miradas silenciosas y sucias de sus compañeros de clase reemplazadas por gritos en línea y despotricar de los fanáticos del cómic que no quieren que las chicas estúpidas arruinen sus cosas. Y Dios no quiera que seas una niña que escribe sobre cómics en línea; es muy fácil para los fanáticos enojados y enojados convertirse en defensores innecesarios de estos personajes contra las chicas malvadas que se atreven a querer ver una mejor representación.

Y aunque tenemos cómics increíbles dirigidos a mujeres jóvenes, que incluyen, entre otros, Leñadores , Sra. Marvel , Capitán Marvel , Cleopatra en el espacio , Tormenta , Bati-chica (La carrera de Simone y el nuevo equipo por igual), y el próximo Academia Gotham , eso no significa que las chicas los estén encontrando. Como leí Animorfos y otros jóvenes jóvenes encendieron y vieron las caricaturas de superhéroes pero nunca se metieron en los cómics, tenemos mujeres jóvenes hoy que leen Los juegos del hambre y otros YA iluminados, que ven las películas de Marvel y los dibujos animados de DC más recientes, pero nunca entran en los cómics. Hay chicas que aman a la arquera Katniss Everdeen pero que no sabían de Kate Bishop en Jóvenes Vengadores . Tienes una audiencia principalmente femenina en Flecha, y, sin embargo, muchos de esos fanáticos no tocarán el New 52. Por llorar en voz alta, cuando las niñas y las mujeres representan más del 40% de la audiencia en las películas de MCU y las chicas todavía dudan en leer los cómics por el contenido o la comunidad en torno al contenido, entonces tienes un problema. Y creo que es el mismo problema que me tenía a los 12 años amando Animorfos pero evitando los cómics como la peste.

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La identidad más amplia, la cultura más amplia, de los cómics sigue siendo un club de chicos, y es revelador que, para todos los grandes cómics dirigidos a las niñas, demasiados cómics que obtienen la mayor promoción de sus empresas son los que alienan a las lectoras. Infierno, Mujer araña se dirigió hace apenas un mes como el próximo gran cómic de Marvel a favor de las mujeres y, sin embargo, se promocionó con una portada variante de nivel Escher Girl junto a su portada principal. Más que eso, el tono sordo de la reacción de Marvel, cómo están desconcertados e irritados de que alguien pueda encontrar que esa tapadera es contraria a la intuición de su misión de cultivar una audiencia femenina, dice mucho sobre lo frustrante que todavía es ser un lectora. Sin mencionar su eventual explicación de la portada que apuntaban a los coleccionistas. Porque incluso si una serie es aclamada con orgullo para las mujeres, es mejor que no olvidemos incluir a los lectores incondicionales masculinos heterosexuales que quieren poses sexuales en sus portadas, ¿verdad? Simplemente no sería justo de lo contrario . Entonces, ¿a quién le importa si las mujeres que buscan meterse en los cómics tienen una idea equivocada sobre la serie ya que anunciamos la portada variante junto a la oficial, verdad?

Como dije al principio, nada de esto es necesariamente nuevo, incluso las portadas sexistas aclamadas como empoderadoras, pero si la industria del cómic realmente está mejorando, ¿no deberíamos haber superado este tipo de obviedad a estas alturas?

La pregunta es hasta qué punto los cómics (y quienes los crean) deberían ser responsables de hacer de la cultura del cómic un lugar atractivo para las niñas. No sé una respuesta exacta aquí, pero creo que una cierta ¡Shortpacked! cómic todavía se aplica en 2014. Porque pienso en las chicas que ven Starfire en Los jóvenes titanes van en este momento, ¿quién tal vez incluso revisó el mayor Titanes adolescentes caricatura y decidió buscar las historietas con ella en ella. ¿Cuántas de esas chicas se encontrarán con eso? Caperucita roja y los forajidos cubrir a partir de junio con Starfire tendido en un coche como una página central ? ¿Cuántas de esas chicas dejarán caer su entusiasmo como una roca y pensarán: Bueno, supongo que los cómics no son para mí, y nunca se atreverán a ver todos los grandes cómics que se están haciendo para su ¿demográfico?

Todo se reduce a esto: ¿vamos a culpar a las posibles lectoras por no esforzarse más en meterse en los cómics, por alejarse de las cosas nerd que las hacen sentir incómodas y por evitar los espacios nerd por temor a ser molestadas y no bienvenidas? ¿O la industria del cómic, especialmente los dos grandes, va a asumir la responsabilidad de alejar a las mujeres jóvenes atendiendo principalmente al mínimo común denominador sobre todos los demás? ¿Estamos todos (fanáticos de los cómics, tiendas, creadores y compañías por igual) dispuestos no solo a señalar a las niñas hacia los cómics que les encajen, sino también a mostrarles que encajan en la cultura del cómic y que van a ser aceptadas como compañeros lectores? ? ¿Podemos asegurarnos de que esta nueva generación de lectores de cómics no tardará años en descubrir que estas historias también pueden ser para ellos?

Katie Schenkel ( @JustPlainTweets ) es redactor publicitario de día, escritor de cultura pop de noche. Sus amores incluyen dibujos animados, superhéroes, feminismo y cualquier combinación de los tres. Sus reseñas se pueden encontrar en Clic clic y su propio sitio web Simplemente algo sencillo , donde aloja el podcast de JPS y su serie web Conduciendo a casa la película . También es comentarista frecuente de The Mary Sue como JustPlainSomething.